El esperado regreso del rompehielos Irízar
El rompehielos Almirante Irízar finalizó sus primeras
pruebas de mar luego de un prolongado e inexplicable período de reparaciones,
si se cuentan siete años de reparación, desde 2010, más los tres primeros en
los que se estuvo decidiendo su futuro.
El buque, que está fuera de servicio desde el incendio que
sufrió en 2007, fue sometido a un proceso de reconstrucción y modernización y
se ha convertido en un rompehielos único en el hemisferio sur, ya que incorporó
tecnología de última generación, duplicó su capacidad de transporte de gas oil
antártico e incrementó en un 600% la cantidad de espacio dedicado a la
investigación científica.
Como se recordará, el incendio del Irízar, comandado por el
capitán de fragata Guillermo Tarapow, quien decidió permanecer a bordo de su
nave después de haber impartido a todo el personal a bordo la orden de
abandonarla, comenzó el 10 de abril de 2007 a las 19. Volvía de la campaña
antártica y se encontraba a unos 260 kilómetros de Puerto Madryn, Chubut. No
hubo pérdidas humanas. Pero desde entonces, bajo los dos gobiernos de Cristina
Kirchner, el Estado debió recurrir al alquiler de buques, aviones y
helicópteros extranjeros para cumplir con las campañas antárticas. Se
denunciaron presuntos negociados con los alquileres.
La misión fundamental del Rompehielos es el
reaprovisionamiento de las bases, destacamentos o refugios ubicados en los
archipiélagos Shetlands y Orcadas, en el norte de la península antártica y en
el mar de Weddell. Además, transporta personal científico con el objeto de
realizar estudios múltiples a bordo, ya que cuenta con un laboratorio
oceanográfico y otro para análisis de la biología, geología, física y química
del mar y la atmósfera. Por último, es un buque de salvataje, con la
posibilidad de remolcar otra embarcación y de convertirse en un importante
centro hospitalario móvil.
El continente antártico es parte indivisible de la actitud estratégica que la Argentina adoptó siempre en el área marítima de interés soberano y en la cual el Almirante Irízar es un referente imprescindible.
El presidente Macri, de regreso de su visita a los Estados
Unidos, encabezó un acto realizado en los talleres de la empresa Tandanor donde
se anunció que el Irízar volverá a navegar las aguas del hemisferio sur.
"Esta nave insignia de nuestro programa antártico representa mucho de lo
que está pasando hoy en el país", aseguró el Presidente.
En este sentido, resulta oportuno destacar la condición
humana y tenacidad de quienes, pese a todo, han logrado reacondicionar el
rompehielos y ponerlo a "son de mar" nuevamente. El tiempo y las
dificultades extremas no doblegaron su espíritu. El Irízar volverá a navegar en
soledad por el mar que lo vio arder
Es de desear que la puesta a punto del rompehielos siga su
curso sin interrupciones para que, como lo señaló el presidente Mauricio Macri,
vuelva a ser la nave insignia de la próxima campaña antártica, ya que para el
rompehielos Almirante Irízar su norte está en el sur.
Fuente LaNacion
Fuente LaNacion
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