El rompehielos Almirante Irízar rescató a cinco científicos
estadounidenses que se encontraban varados en la Antártida el pasado 12 de
marzo.
El buque polar, abocado a la Campaña Antártica de Verano
(CAV) que lleva adelante la cartera de Defensa, actuó a requerimiento de la
Cancillería Argentina y se dirigió a la isla Joinville para rescatar a los
científicos que se encontraban varados en un campamento allí erigido.
El comandante conjunto antártico, comodoro de marina Pablo
Fal, la Cancillería de nuestro país recibió un pedido de la National Science
Foundation de Estados Unidos para asistir a los profesionales de ese país que
se encontraban aislados.
La ubicación era muy cercana las bases Petrel y Esperanza que la Argentina
posee en el Golfo de Erebus y Terror.
Cuatro científicos de Estados Unidos liderados por Alexander
R. Simms, de la Universidad de California Santa Bárbara, y un empleado de la
base de apoyo de la Fundación Nacional de Ciencias estaban en la isla de
Joinville llevando a cabo investigaciones sobre el clima.
"El grupo iba a ser ser recogido y volver a Estados
Unidos a bordo del Gould, pero las condiciones del hielo marino impidieron que
la nave se acerca a la isla. No estaban en peligro inmediato, teniendo más de
una semana de suministros, un campamento seguro, y comunicaciones con el mundo
exterior", añadió el informe de los Estados Unidos.
La asistencia se realizó mediante cuatro vuelos con helicópteros Sea King de manera exitosa, y los científicos serán transportados durante esta jornada al buque Laurence M. Gould de Estados Unidos.
La ayuda brindada se enmarca en los compromisos asumidos por
nuestro país mediante el Tratado Antártico, que implica asistencia a la vida
humana en el continente blanco y sus aguas circundantes.
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